jueves, 6 de diciembre de 2007

Sangre rápida

Esta mañana tuve una visión horrible. De camino al trabajo, o sea, a un taller de teatro con niños, el minibús donde iba se cruzó con un espectáculo dantesco: una mujer aturdida, con la mirada posada en su confusión, sangrando por la cabeza, por los ojos, por la nariz, por la boca. La imagen perfecta del terror. No sé qué pasó ni por qué estaba así la mujer, pero me dejó frío para todo el día.

Me bajo del minibús, y, para mejorar el día, veo las portadas de los periódicos: "Cuatro ladrones quemados vivos en El Alto". Con fotos en primerísimo primer plano. Ante la imagen de la mujer, todos los ciudadanos se paraban; ante la otra, la periodística, nadie.

Sangre que llama a sangre. Sangre que convoca a sangre. Para esta tarde se espera que también corra la sangre: una marcha de cocaleros desafiará a los matones del bombón - prefecto. Se verá una nueva demostración de la estupidez humana. Sangre rápida, sin decisiones, sin cambios. Continúa el Carnaval, viva Bolivia!!

lunes, 3 de diciembre de 2007

Entre carcajodas y personajes góticos


Ayer no paré de reír en toda la noche. Resulta que estuve saliendo durante dos meses con una mujer, preciosa y culta ella, que en realidad era el Dr. Jekyll.


Hace casi un mes, sin que nada lo mediase, ella decidió cortar por lo sano la relación - que había sido idílica todo el tiempo, para nuestra sorpresa -.


En fin, cuando quise saber qué pasaba, Mr. Hyde apareció.


Ayer, tanto el doctor Jekyll como el señor Hyde se borraron de mi mente y fueron sustituidos por una larga y aliviada carcajoda. No sólo no había hecho nada malo para que, de repente, la relación se hubiera ido a la mierda, sino que había sido al revés.


Esta noche llega mi venganza.


Quizá otro día les cuente qué ocurrió.


Saludos.